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Vivir al día

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Me despierto. No sé dónde estoy. No reconozco la habitación, los muebles, nada. No me reconozco ni a mí. A mi lado, sobre la mesita de noche, un sobre con unas letras grandes que dicen “lee”. No reconozco la letra. Leo.

Querido,
Me han diagnosticado un tumor cerebral. El único tratamiento posible es la cirugía, pero el tumor está localitzado en la zona de la memoria,yi en el mejor de los casos, si sobrevivo, quedará afectada mi capacidad para recordar.

Elegir entre dos muertes. La muerte de verdad, la del olvido. O el olvido de verdad, la falsa muerte, la muerte de la mente y no del cuerpo. Enfrentarse al destino final o posponerlo. ¿Posponerlo? Tampoco, porque, ¿quién soy sin recuerdos? Tú.

Si estás leyendo esto es porque elijo el olvido. Ahora te despiertas, temprano, y no sabes quién eres, dónde estás, qué sabes. Quizá ni sabes leer, y estoy perdiendo el tiempo escribiéndote estas letras. Pero me dicen que no, que cuando todo esto termine (cuando todo esto empiece), sólo habré perdido (habrás perdido) los recuerdos y no las cosas aprendidas.

Te enfrentas a un nuevo día. De hecho, te enfrentas a una nueva vida. Una vida que durará el tiempo que te mantengas despierto. Una vez te duermas, los recuerdos huirán, y dejaraś, de nuevo, de ser tú.

Sé que tendrás la tentación de vivir al límite. Si sólo tienes un día, ¿por qué desaprovecharlo? Si de todas formas morirás esta noche, ¿por qué no arriesgarte? Emociones fuertes, extremas, brutales. Emociones que te dejen sin aliento, y que te hagan temer por tu seguridad. O no, porque de todas formas, morirás cuando te vayas a dormir.

No desperdicies la vida, porque no es tuya. Es mía, y yo no te la regalo, te la presto. Te la presto para que la vivas, porque yo no podré. Pero cuando la hayas exprimido, no la tires, guárdala. Guárdala para mañana, para que un nuevo tú (un nuevo yo) se despierte, lea estas letras y viva un nuevo día como si fuera una nueva vida, una nueva vida de un solo día.

Ama, abraza, ríe, sonríe, besa. No te escondas, no te preocupes por lo que piensan los otros, preocúpate por los otros. No pierdas el tiempo pensando qué puedes hacer durante esta vida, durante este día. Hazlo.

De hecho, ¿qué diferencia habrá entre tu vida y la de los demás? Lo que dure. Tú vivirás un día, y ellos muchos más. Pero tú sabes que vivirás un día. Ellos, creyendo que vivirán eternamente, dejarán pasar este día (esta vida) preocupándose, sin reir, besar, amar, abrazar, sin sonreir. Tú no tendrás recuerdos, pero ellos, quizá, no tendrán vida.

Siempre tuyo,

¿Cuántas veces habré leído estas letras? ¿Cuántos días de mi vida, cuántas vidas habré desperdiciado sin seguir su consejo?
Hoy es el primer día de mi vida. Hoy es mi vida. Hoy viviré. Soy afortunado.

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